Cuánto vale mi huella hídrica

La Huella Hídrica es el indicador de nuestro uso directo o indirecto del agua dulce del planeta para obtener bienes y servicios. La HH evalúa el impacto que supone nuestra apropiación del agua para la producción de distintos bienes tratando materias primas. Además, la periodicidad o frecuencia con la que llevamos a cabo el consumo personal de agua potable o saneamiento y el ritmo de consumo excesivo de productos y servicios diariamente marca una brecha medio ambiental y social.

Sin embargo, la población de los países que disponen de un buen nivel de vida y economía, y consumen la mayoría de agua dulce del mundo, no se ven afectados por los recursos que estamos cogiendo de la Tierra constantemente.

"Está en nuestras manos que el agua sea un derecho del que todos podemos disfrutar y no solo unos pocos.

El agua no es un privilegio, es un derecho."

Las bases conceptuales de este indicador se asentaron y hoy en día se calcula globalmente. La HH consta de tres sumandos según el color característico del agua.

• La huella hídrica azul hace referencia al agua captada por las infraestructuras creadas por el ser humano procedente de fuentes naturales o artificiales.

• El total del agua almacenada en la superficie del suelo a causa de las lluvias o nevadas se denomina la huella hídrica verde.

• Por último, la huella hídrica gris se encarga de calcular el volumen de agua contaminada en los procesos, que por tanto debe ser purificada para cumplir con ciertos parámetros a la hora de mantener la salubridad del agua.

El objetivo de la huella hídrica es concienciar mostrando el agua real que necesitamos para continuar con nuestra vida de modo que sin ella no existe un futuro. Por eso nuestro deber es cuidarla, preservar nuestro planeta hasta el punto de no destruirnos a nosotros mismos.

Mirar más allá de nuestras comodidades hoy y actuar para que mañana no hayamos llegado al final de la partida. Estamos verdaderamente al límite, nuestro margen de tiempo es muy reducido, los próximos cinco o diez años todavía mantienen esperanza para diversos cambios globales en los que absolutamente todos tenemos que contribuir.

Nuestra última oportunidad es ahora, por esta razón el primer paso que debemos dar es conocer.